Sabemos que los electrodomésticos no duran toda la vida pero ¿por qué no aumentar un poco más su vida útil? Precisamente en esta entrada queremos ofreceros algunos consejos para que duren un poco más. Las causas por las que se suelen estropear los electrodomésticos son en general tres: falta de limpieza, negligencia en su manipulación y por cambios bruscos de voltaje en el sistema eléctrico.

La limpieza, un paso importante.

La limpieza y el buen mantenimiento de nuestros electrodomésticos es esencial para preservarlos. Sustancias como el polvo y la grasa pueden disminuir sus años de funcionamiento. Por eso, lo mejor es darle una limpieza habitual adecuada, y en lo posible mantenerlos cubiertos con fundas cuando se encuentren fuera de uso.

Instalación eléctrica.

Debemos procurar que las instalaciones eléctricas de nuestro hogar estén en óptimas condiciones siempre. La mejor idea será mantenerlos desenchufados cuando no se estén utilizando, de este modo, si hay una subida de tensión en la red eléctrica, no afectará en nada.

Algunos ejemplos prácticos.

El frigorífico. Al instalar nuestro frigorífico debemos hacerlo lejos de las fuentes de calor, es decir, el electrodoméstico debe permanecer alejada del sol, horno o calefacción. El motivo es que el motor del refrigerador se sobrecalienta y puede llegar hasta fundirse.

La vitrocerámica. Su problema más tradicional se vincula con la rotura del cristal cuando sufrimos algún accidente casero. Para evitar este problema colocaremos una tapa protectora que permanecerá baja cuando la placa no esté en uso; también se aconseja utilizar recipientes de fondo plano para aprovechar al máximo el calor y evitar ralladuras.

En Construcciones Palomares nos gusta teneros bien informados, porque vuestras preocupaciones son las nuestras.